Alphabet, el holding de Google
Nuestra cartografía presenta la composición del holding de Google, Alphabet. Este holding, nacido el 2 de octubre de 2015, es un medio de clarificación para los directivos de Google de las actividades del gigante de la red. ¡Que no son todas las actividades de Internet!
Un coloso con perfil atípico
Google es un gigante, un «GAFA» (Google, Amazon, Facebook, Apple). Pero «Alphabet» no contiene solo un motor de búsqueda, aunque esta actividad histórica sea la fuente de ingresos colosales. Un volumen de negocio de setenta y cinco mil millones de dólares en 2015, una capitalización bursátil fuera de serie, para unos resultados en crecimiento. Todo va bien en el universo del gigante de Mountain View.
AdWords, la agencia publicitaria de Google, genera la casi totalidad del volumen de negocio de Alphabet. Recordemos que AdWords permite a los anunciantes difundir publicidad en el buscador y en algunos millones de ubicaciones en la red, a través de una gran red de sitios web asociados. Así, la publicidad aparece una y otra vez, como ocurre en los otros espacios digitales como Facebook, Twitter o Pinterest, que no dudan en monetizar los lugares elegidos por los anunciantes.
La especificidad de ser un motor de búsqueda, y esto es lo más importante, ha permitido a Google posicionarse en ciertos países –como en Francia– como un interlocutor imprescindible para el internauta, cuando este se involucra en un pequeño juego de preguntas y respuestas con el buscador. De “cómo dejar de sudar” a “cuál es el futuro del planeta”, Google proporciona siempre respuestas ordenadas por pertinencia. Por otra parte, señalemos que Sundar Pichai, PDG de Google, estimó que el futuro de Google era convertirse en el “asistente supremo” (para la vida). El objetivo anunciado es que sea posible contactar, interactuar y hablar con Google como si fuera una persona. Google debe humanizarse. Y esto pasa por el tan difícil control de la lengua, para lo que las inversiones son colosales.
Como se puede ver, Alphabet sin Google perdería dinero. Pero ¿qué pasa con las otras entidades?
En Alphabet, «apostamos»
Las “apuestas” de Alphabet son las diferentes empresas-actividades que se pueden ver posicionadas en el mapa. Por otra parte, estas empresas son las más conocidas del holding: Google por supuesto, pero también Jigsaw, Nest, Calico, SidewalkLabs, Google Fiber, X, Google Capital, Google Ventures, Verily. Tengamos en cuenta que Boston Dynamics (que no figura aquí), de la que Alphabet tarda en separarse, a pesar de los anuncios, ha producido interesantes robots, sobre los que se pueden ver videos aquí y allá en Internet.
El riesgo es inherente a las apuestas y, en el caso de Alphabet, este existe en el plano financiero, en la credibilidad y en la notoriedad. El ejemplo del ascensor espacial (proyecto de la entidad “X”), proyecto abandonado por razones técnicas, es significativo. Soñar, experimentar, generando confianza entre los inversores y los mercados en general, es la ecuación que Alphabet tiene que resolver.
Alphabet no es Google
Alphabet, nos damos cuenta con la cartografía, no es un «Google» amplificado. Si recordamos la misión adoptada por Google –a saber, la recogida y organización de la información para hacerla accesible y útil a todos–, podemos constatar fácilmente que ciertas entidades del holding no responden a este objetivo. Google Capital, que invierte en proyectos de una cierta madurez, es un ejemplo. El matiz a aportar es que siempre se trata de actividades vinculadas con las nuevas tecnologías, incluso creadoras de tecnologías.
Alphabet, la vida de la A a la Z
El hombre está en el centro de nuestra cartografía, tanto como que es el centro de las preocupaciones de Alphabet. Desde la intimidad al espacio, todo está cubierto por Alphabet. Ahí donde mira el hombre, Alphabet está presente. Hacer más fácil nuestra vida diaria, pensar la ciudad de otra forma o incluso reinventar la geopolítica, son actividades que tocan de cerca o de lejos nuestra vida diaria, nuestra vida.
Lo más fascinante de las empresas es probablemente la acertadamente denominada “Calico” (de California Life Company), cuya misión es luchar contra el envejecimiento e incluso interesarse en los factores que causan la muerte. Es decir, matar la muerte.